El oso Tamá está en condiciones óptimas para vivir en el Parque Nacional Natural Tamá: comienza la cuenta regresiva para volver a casa
- Parques Nacionales Naturales de Colombia junto con sus guardaparques y la comunidad esperan con emoción el regreso del oso Tamá al Parque Nacional Natural Tamá, tras un largo proceso de articulación institucional liderado por Parques Nacionales Naturales de Colombia y la Fundación Parque Jaime Duque, en conjunto con el Santuario del Oso de Anteojos, la Fundación Wii, la CAR Cundinamarca, Corpoguavio, Corponor, Inparques Venezuela y Cenit.
- El retorno del oso Tamá a su hogar es un símbolo de resistencia, perseverancia y reconciliación con la naturaleza. Su liberación da esperanza a su especie que hoy está clasificada como Vulnerable (VU) por la UICN.
- “Tamá vuelve a casa”: el 17 de diciembre será un grandiOSO día. Diciembre es una época estratégica, debido a la floración y, por tanto, a la abundancia de alimento disponible para el oso.
Bogotá, – Colombia recibió con el corazón en la mano la noticia, en 2022, que el oso Tamá había escapado de La Reserva Natural Bioparque Wakatá, en el Parque Jaime Duque. Durante 15 días de incertidumbre se siguió el rastro de este oso andino (Tremarctos ornatus), que logró mantenerse con vida, hizo sus camaretas para dormir, trepó los árboles y buscó frutos silvestres para alimentarse por su cuenta en el cerro Tibitó en el municipio de Tocancipá, Cundinamarca.
Su “escapada” le aseguró el retorno al lugar donde nació: el Parque Nacional Natural Tamá, ubicado en los municipios de Toledo y Herrán (Norte de Santander), donde en 2014 fue rescatado por guardaparques del área protegida. Con apenas cuatro meses, este osezno quedó huérfano y a la deriva, luego de que cazadores mataran a su mamá, por lo que fue trasladado al sector norte del Parque, donde recibió atención temporal de los guardaparques mientras Parques Nacionales hacía entrega oficial a La Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental, CORPONOR.
Dado que Tamá no contaba con las condiciones para regresar de inmediato a la vida silvestre, fue llevado a un Centro de Rehabilitación de Alta Montaña en Guasca, Cundinamarca. Allí recibió cuidados especializados, alimentación adecuada y aprendió comportamientos propios de su especie, aprendizajes que fueron clave durante los 15 días que permaneció fuera del Bioparque Wakatá en 2022.
Tras una operación interinstitucional, Tamá fue recapturado para garantizar su bienestar y continuar su proceso de rehabilitación. Su fuga retomó el proyecto del Santuario del Oso de Anteojos en Guasca, liderado por la Fundación Parque Jaime Duque y el Veterinario Orlando Feliciano, creado como un espacio dedicado a la rehabilitación de esta especie. Tamá permaneció allí los últimos años, mientras un equipo interinstitucional e interdisciplinario lo cuidaba y preparaba los detalles de su liberación.
Hoy Tamá es un oso fuerte: pesa 174 kilos y conserva plenamente su habilidad para sobrevivir en su hábitat natural. Por eso se prepara para regresar al lugar donde nació, en el PNN Tamá, en el marco del proceso “Tamá vuelve a casa”. El 17 de diciembre será el día de retorno.
Tama saldrá del Santuario del Oso de Anteojos ubicado en Guasca y pasará la noche en el Parque Jaime Duque el 16 de diciembre. Al día siguiente, en la mañana, partirá del Aeropuerto Guaymaral Flaminio Suárez Camacho rumbo a Cúcuta, donde será recogido por un helicóptero que lo llevará al Parque Nacional Natural Tamá, ubicado en la zona de frontera con Venezuela. Un operativo intenso pero cuidadoso donde el bienestar de Tamá será lo primordial, estará acompañado en todo momento del equipo técnico veterinario del Santuario.
“Tamá vuelve a casa”: el Parque Nacional Natural Tamá lo espera
El regreso del oso es el resultado de un trabajo articulado entre Parques Nacionales Naturales de Colombia, el Parque Nacional Natural Tamá y sus guardaparques, La Fundación Parque Jaime Duque junto con el Santuario del Oso de Anteojos, la Fundación Wii, la CAR Cundinamarca, Corpoguavio, Corponor, Inparques Venezuela y Cenit.
El equipo del Parque Tamá ha realizado recorridos en el área protegida para identificar el tiempo y lugar adecuado para su liberación. Luego del trabajo de campo se determinó que diciembre es una época estratégica, debido a la floración y, por tanto, a la abundancia de alimento disponible para el oso.
Seguimiento en casa
Tamá tendrá un collar de seguimiento satelital con transmisor, donde el equipo de monitoreo podrá hacerle seguimiento los días posteriores a su liberación con el fin de establecer su adaptación y su movimiento en el parque, esto permite tener información importante que será de gran ayuda para seguir realizando acciones de conservación de la especie tanto en el Parque como en otros lugares del país.
Las segundas oportunidades para todos
El retorno del oso Tamá a su hogar, es un símbolo de resistencia, perseverancia y reconciliación con la naturaleza. Tras las dificultades propias de la orfandad, el estar lejos de su hábitat y tener la fuerza e inteligencia que lo caracterizan, da esperanza a su especie que hoy está clasificada como Vulnerable (VU) por la UICN, lo que indica que enfrenta un alto riesgo de extinción, principalmente por la pérdida y fragmentación de su hábitat, la expansión agrícola y las interacciones con humanos.
El reintegro a su hábitat es una oportunidad para mostrarle a los colombianos y al mundo que se puede vivir en paz con la naturaleza y que vale la pena conservar cuando las instituciones y personas se unen con un propósito.
Así es el hogar de Tamá: el Parque Nacional Natural Tamá
El PNN Tamá se encuentra en la Cordillera Oriental, en el extremo suroriental del departamento de Norte de Santander, en los municipios de Toledo (98,5%) y Herrán (1,5%). Limita al sur con Cubará (Boyacá) y al oriente con la República Bolivariana de Venezuela.
Cuenta con seis ecosistemas —páramo, bosque húmedo altoandino, bosque húmedo subandino, selva húmeda tropical y zonas de humedal— que aportan múltiples fuentes de alimento como bromelias, frutos carnosos y palmas. Estas condiciones pueden satisfacer las necesidades del oso, que, a diferencia de otros carnívoros con requerimientos específicos o territorios restringidos, presenta una notable flexibilidad ecológica. El Parque conserva más del 95,6% de sus coberturas naturales en excelente estado.
Conservación del oso andino en el Parque Nacional Natural Tamá
Los monitoreos realizados en 2024 muestran que el oso andino usa con frecuencia el hábitat del Parque. La probabilidad de presencia en las áreas evaluadas es alta (75%) y, aunque no siempre es fácil detectarlo, existe evidencia suficiente para confirmar su presencia continua.
Sobre el oso andino (Tremarctos ornatus)
El oso andino es el único oso de Sudamérica y es endémico de los Andes tropicales, desde Venezuela hasta Argentina. Se reconoce por sus distintivas marcas blancas alrededor de los ojos —similares a unos anteojos— y por su importancia ecológica como dispersor de semillas y “especie sombrilla”. Es omnívoro, solitario y habita bosques y páramos. Enfrenta amenazas como la pérdida de hábitat y la cacería, lo que lo clasifica como Vulnerable en la Lista Roja de la UICN, con poblaciones en disminución.

