Comunidades
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Indígenas

Dentro del Parque Nacional Natural Paramillo conviven comunidades Embera katío y chamí y comunidades campesinas desde antes de la conformación legal del área protegida.

El parque se traslapa con tres resguardos del pueblo Embera katío o eyabida y chamí. El más grande ellos es el resguardo del Alto Sinú el cual se ubica al norte del parque, entre los municipios de Tierralta (Córdoba) e Ituango (Antioquia), abarcando unas 124.145,2 hectáreas (equivalentes a un 97,25% del resguardo traslapado con el Parque). El resguardo Quebrada Cañaveral se ubica en la parte alta del río San Jorge, en el municipio de Puerto Libertador y tiene 729,93 hectáreas de traslape con el Parque para un porcentaje aproximado del 27,6% del área total del área protegida. El resguardo Yaberaradó tiene aproximadamente 2.037,61 hectáreas de traslape.

Las comunidades indígenas que habitan estos resguardos, basan su economía en actividades como la agricultura, caza, pesca y recolección, lo que sustenta a más 700 familias Embera tanto katíos como chamí. Su organización social se conforma alrededor de parenterales, sus viviendas son unifamiliares conocidas como tambos las cuales se ubican cerca a los cursos de agua.

A lo largo del tiempo en las comunidades de los resguardos se han dado cambios en sus actividades productivas y económicas, que son atribuidas a los siguientes factores de cambio: El relacionamiento con los campesinos, la desaparición de los bosques y de los animales del bosque, organización social y política, la iglesia, la educación y el crecimiento poblacional.  Actualmente el área protegida lleva a cabo algunos planes de trabajo con las autoridades indígenas y sus comunidades basados en las temáticas de gobierno propio y territorio.

Campesinos

 Los campesinos están localizados en 21 sectores del parque. De acuerdo a los datos acopiados por el área protegida, se estima que el número de familias campesinas es de 2.223 habitantes, las cuales se distribuyen de manera mayoritaria en dos de los seis municipios que tienen jurisdicción sobre el área protegida, estos son, Tierralta e Ituango y están localizados en 21 sectores de ocupación campesina

Las actividades que adelantan estas familias campesinas están clasificadas como “no permitidas” o “prohibidas” y tienen que ver con ampliación de frontera agrícola y pecuaria, la tala selectiva de bosques con fines comerciales, la cacería de fauna silvestre con fines de subsistencia y comercio, impactando un área aproximada de 60.800 hectáreas equivalentes al 12% del total del Parque Nacional Natural. Actualmente el área protegida lleva a cabo algunas Mesas de Concertación Locales y Sublocales de Campesinos para darle solución a algunas de las problemáticas derivadas del uso, ocupación y tenencia en el marco del posconflicto.